Sunday, August 19, 2007


Hoy, una vez más comprobé que el tiempo es elástico… o que al menos, mi concepción de el puede llegar a serlo…

Junto a ti… el tiempo vuela.

Cuando estás lejos… el tiempo que resta para verte muchas veces triplica su valor!!!

Mmm… será que el ritmo de mi corazón influye?

Si fuera así, necesito aprender a controlar la cantidad de *“bpm’s” de mi corazón…

Aunque… las cosas son lo que son.

Ni el tiempo es elástico

Ni mi pulso cardíaco tiene la más mínima influencia sobre el “chronos”…

Todo debe permanecer como está…

Si mi “tactus” tuviera control sobre el “chronos”, el proceso de contrarrestar la (supuesta…), elasticidad maquiavélica de los exactamente cuantizados brazos del señor reloj, tendría nefastos efectos secundarios…

A pesar de la agonía de estas horas sin ti, prefiero conservar el ritmo desbocado de mi corazón al verte y tenerte cerca… al menos por un nunca suficiente “periodo de tiempo”…

(*) beats por minuto

Tuesday, August 07, 2007

Emociones Fuertes...


Mi cuerpo se estremece… se vuelve hipersensitivo. Ya perdí la cuenta de los escalofríos y de las veces por minuto en que se me ha erizado la piel…

Un hormigueo extrañamente dulce y placentero recorre mi tórax, mientras siento cómo levemente mis pies se separan del suelo…

También acústicamente el entorno se vuelve difuso… ya que la música que debiera ser “ambiental” se interna en mí de una forma sutil, pero masiva…

Es como si mis hormonas giraran al ritmo combinado del ambiente [efectos especiales incluidos…], y el agitado latir de mi corazón que, -dicho sea de paso- ya no sé si está dentro mío o hace rato que traspasó mis costillas…

De pronto… abro mis ojos y despierto.

La imagen más hermosa que podría existir está justo frente a mí!!

No era el efecto de una poderosa y alucinógena droga…

Y, maravillosamente, no era todo esto producto de un placentero sueño…

Frente a mí estás tú…

Y fui abstraído como una despistada víctima, al fantástico mundo de uno de tus mejores besos…

Marcos A. Gómez